Por la noche, los bastones del ojo necesitan y consumen una gran cantidad de oxígeno para adaptarse a la oscuridad. Los pacientes con diabetes tienen un déficit de oxígeno en el ojo debido a la reducción de la circulación sanguínea causada por los problemas de microvascularización de la retina y los altos niveles de azúcar en sangre.
Ante esta falta de disponibilidad de oxígeno, el organismo responde produciendo hormonas de crecimiento denominadas VEGF, que desarrollan nuevos vasos sanguíneos en el ojo. Estos nuevos vasos son frágiles y sus paredes permiten fácilmente que el exudado (sangre y agua) se filtre en la retina o la mácula (edema macular diabético) y la visión se vea afectada.
La máscara Noctura 400, que se lleva sólo mientras se duerme, es un tratamiento innovador no invasivo de la retinopatía diabética (RD) y el edema macular diabético (EMD), que evita que la retina del paciente diabético se quede sin oxígeno.
La máscara produce una luz específica de baja intensidad a través de los párpados cerrados mientras el paciente duerme, reduciendo la necesidad de oxígeno de estos tejidos.